De caminar
y que resuenen los pasos
y que resuenen los pasos
(que se escuchen)
De saltar alto y
que una hoja me roce
(que el rocío me moje)
De levantarme a la mañana con la ventana abierta, que entre el sol,
y que del sol algo no me deje ver
(por ver amarillo)
De que algo en mis ojos no lo dejen ver
(su reflejo)
De sentir a los de siempre
(que los llevo siempre)
De que aparezca lo entrañable
(que me reconozca) y encontrarnos
(por fin encontrarnos)
Tengo las manos chicas y llenas;
algo se escapa de ellas.
Hay una parte de mí que no se entiende sola
(y quiere ser salvada)
(La esperanza es eso que siempre está latiendo)